Una nutrida delegación española, liderada por la Asociación Española de Fabricantes de Alfalfa Deshidratada (AEFA), participará en el próximo Congreso Mundial de Alfalfa (3 al 6 de noviembre en Reims, Francia).
El objetivo principal de esta misión es captar las últimas tendencias globales, adquirir conocimiento sobre nuevas líneas de investigación y transferir esta inteligencia a la industria nacional para fortalecer su competitividad. Así lo ha confirmado Luis Machín, presidente de la asociación.
La magnitud de la delegación española subraya el compromiso estratégico y la ambición del sector por mantenerse a la vanguardia internacional. No se trata de una presencia testimonial, sino de una demostración de fuerza y de la importancia que la industria nacional otorga a la innovación y al conocimiento como pilares de su futuro.
La comitiva está compuesta por más de 60 participantes, un reflejo claro del interés que suscita el evento. Además, el papel de España en el congreso es proactivo y de gran influencia, ya que la asociación española ha formado parte del comité organizador del evento. Esta masiva y organizada participación responde a una agenda de objetivos muy definidos para el sector.
La asistencia al congreso se plantea como una misión estratégica de inteligencia sectorial. El propósito fundamental es la adquisición de conocimiento para luego aplicarlo en España, con el objetivo de optimizar todos los eslabones de la cadena de valor, desde el campo hasta la industria.
Según lo expuesto por Luis Machín, los objetivos estratégicos de la delegación se resumen en los siguientes puntos:
• Identificar las últimas tendencias del sector, tanto en las prácticas de cultivo como en las previsiones de mercado a futuro.
• Ampliar el conocimiento sobre las nuevas líneas de trabajo e investigación que marcarán el porvenir del cultivo.
• Transferir el conocimiento adquirido de vuelta a España para su implementación a nivel nacional.
• Mejorar la competitividad y la eficiencia en la fabricación, elaboración y cultivo de la alfalfa, abarcando tanto el campo como las industrias transformadoras.
Esta visión, impulsada directamente desde el liderazgo de la asociación, define la hoja de ruta de la delegación en el evento.
“Nuestro objetivo es saber un poco cuáles son las últimas tendencias en el sector de la alfalfa, tanto en temas de campo como en previsiones a futuro, y ampliar conocimiento, saber en qué se está trabajando, en cuáles son las líneas del futuro para, evidentemente, aprender y llevar ese conocimiento de vuelta a España para intentar ser mejores en la fabricación, en la elaboración y en el trabajo de la alfalfa, tanto en el campo como en las industrias”, concluyó Machin en la previa del evento.
 

 
		 
		 
		