Nafosa sale a “buscar alfalfa”

La empresa española, con producción en Rio Negro y plantas en Bahía Blanca y Calchín, sale a buscar alfalfa de terceros por que la demanda supera la producción propia. En el sur del país producen 1500 hectáreas bajo riego.

En el contexto actual de la alfalfa, la empresa Alfalfa y Forrajes de la Patagonia subsidiaria de la española Nafosa que integra la Cámara Argentina de Alfalfa, busca conseguir mayor volumen de alfalfa. El ingeniero agrónomo Nicolás Maico, dialogó con TodoAlfalfa y explicó el objetivo de poder sumar productores que se transformen en proveedores. 

Instalados en Pomona, Rio Negro, desde el año 2010 y con plantas procesadoras en Bahía Blanca (Buenos Aires) y Calchín (Córdoba), producen megafardos de Alfalfa que exportan, pero como “la demanda supera la producción propia” es necesario buscar alfalfa en terceros. 

Para lograr ese objetivo de abastecerlos hay exigentes que cumplir: “el producto no debe tener más de un 16% de humedad, menos de un 5% de malezas y no debe existir restos de heces de animales”.

Maico fue además uno de los disertantes de la PACA 2025, y en ese marco, se anunció que Alfalfa y Forrajes de la Patagonia se transformará en socio estratégico del Clúster de Alfalfa de Córdoba. 

Para Maico la presencia suya en representación de la empresa “no debe ser vista únicamente como un esfuerzo para abastecer a nuestras plantas, sino también como una oportunidad para conformar asociaciones que permitan compartir conocimientos y técnicas que beneficien a toda la cadena productiva”. 

Este enfoque colaborativo es esencial para enfrentar los desafíos del mercado y mejorar la competitividad de nuestros productos, especialmente ante un panorama en el que factores como el clima pueden alterar significativamente las cosechas.

Recientemente, nos enfrentamos a una situación climática inesperada: la lluvia. “Aunque estábamos preparados para comenzar con la recepción de las cosechas, este fenómeno climático ha provocado un retraso en el corte programado”, indicó.

Sin embargo, al parecer, no habría generado un impacto negativo en la alfalfa “si se han realizado las prácticas agronómicas adecuadas, como el uso oportuno de fertilizantes”, apuntó y agregó que “el exceso de oferta en el mercado interno podría provocar un impacto negativo en el precio, escenario que permitiría abrir oportunidades para la exportación, permitiendo acaparar un mayor volumen si se logra mantener un estándar de calidad”. 

Consultado sobre la posición de Nafosa sobre la situación del mercado actual dijo que “la exportación se mantiene fuerte, impulsada por un ligero aumento en los precios internacionales”. Esa es la razón de la expansión en Argentina con un “crecimiento no solo proviene de la producción a gran escala, sino también de la implementación de tecnologías innovadoras y pivots de riego en nuestras tierras en Pomona, donde anualmente se instalan nuevas infraestructuras para optimizar la producción”.

“Con un total de 10.000 hectáreas dedicadas al cultivo, actualmente bajo riego tenemos 1.500 hectáreas”, indicó y sumó que “el riego se presenta como la única solución viable para garantizar la producción en una zona donde las precipitaciones anuales apenas alcanzan entre 250 y 300 milímetros. Esto convierte a nuestra área en un espacio ideal para cultivar, minimizando el riesgo de lluvias que pueden afectar la calidad de las cosechas”.